El próximo domingo a las 13:00 horas, la comunidad de Ronda celebrará una Misa de acción de gracias en honor al 75 aniversario de la ordenación del querido sacerdote Antonio Gamboa, fallecido en 2004. La ceremonia será oficiada por Francisco Sánchez, párroco de Santa María la Mayor.
En conmemoración de este aniversario, se ha editado una estampa con la oración para la devoción privada, ahora también disponible en inglés, además de las versiones en español, italiano, portugués y polaco. Tras la Misa del domingo, se distribuirán las estampas a todos los asistentes.
Los devotos y amigos del sacerdote Gamboa, que promovieron la edición de la estampa, expresan su deseo de que el ejemplo y la intercesión de este «apóstol de los jóvenes y de la caridad» sirva para inspirar a otros a dedicarse al servicio del Reino de Dios. Salvador Aguilera, sacerdote rondeño y oficial de la Santa Sede, describe al Padre Gamboa como un «cura todoterreno», conocido por su dedicación tanto espiritual como material a sus feligreses.
Aunque el proceso de canonización no está abierto, el obispo ha autorizado la edición de estas estampas para devoción privada, con la intención de difundir el legado de don Antonio Gamboa y registrar las gracias recibidas por su intercesión. Las estampas están disponibles gratuitamente en la torre de la iglesia de Santa María la Mayor de Ronda.
Además, se está organizando un encuentro fraterno en honor a Gamboa para el mes de octubre, coincidiendo con el vigésimo aniversario de su fallecimiento.
Antonio Gamboa López, nacido el 10 de abril de 1912 en Coín (Málaga), fue ordenado sacerdote el 3 de julio de 1949. Después de servir brevemente en Ubrique (Cádiz), se trasladó a Ronda, donde dedicó su vida a la parroquia de Santa María la Mayor hasta 1989. Conocido por su celo apostólico y obras como «Olimpiada del espíritu para jóvenes inquietos» (1986) y «A propósito de las obras de misericordia» (2001), el Padre Gamboa fundó el «Centro Obrero Católico» y fue capellán en la Residencia de las Madres de los Desamparados y San José de la Montaña de Arriate. Falleció el 21 de octubre de 2004, dejando un legado de devoción y servicio a la comunidad.
