En los tiempos en los que estamos parece que subir los precios de productos básicos como alimentación, luz, gas, combustibles o medicamentos es un auténtico disparate.
Esto viene al caso porque se anuncia una subida del agua en Ronda del 6,5 por ciento. Un bien que antes era propiedad del Ayuntamiento y barato ahora resulta que queda en manos de una empresa privada, que como es lógico, busca su beneficio y sube su precio.
Quizás va siendo hora de que el gobierno local se replantee si no sería una opción recuperar la titularidad del agua. De esa manera se controlaría lo que en el rondeño paga y se podría hacer como se ha hecho con los toldos de los comerciantes, rebajar o suprimir determinadas tasas.
El agua es un bien al que todo el mundo debe tener acceso, no solo para su consumo sino también para la higiene personal. El Ayuntamiento puede esforzarse porque no se le sumen cada vez más cargas a los ciudadanos. Con tantos negocios cerrando y el turismo a rachas hay que hacer ejercicios de equilibrismo para que la ciudad siga funcionando, por eso cualquier pequeña ayuda será bienvenida. Hagan algo con el agua por el bien de todos.
