La Virgen de la Cabeza celebró su tradicional Romería después de dos años, casi unos 400 romeros, algunos a caballo, y unas ocho carretas acompañaron a su titular hasta la explanada de la Ermita, donde se celebró la eucaristía presidida por el sacerdote Francisco Sánchez.
Ya a la tarde la Virgen regresó a la ciudad, al convento de las Franciscanas, al estar dañado el patio de la Ermita.