Ronda se prepara para dar inicio a la segunda fase de las obras del Camino del Desfiladero, un ambicioso proyecto que promete transformar el acceso a uno de los paisajes más emblemáticos de la ciudad: la Garganta del Tajo. La empresa Sando ha sido seleccionada para llevar a cabo esta etapa, con un presupuesto de 1.087.426 euros y un plazo de ejecución de seis meses.
Este tramo, que recorrerá desde la base del Puente Nuevo hasta la zona de los baños árabes, pasando por la ermita de San Miguel, añadirá 500 metros a los 200 ya abiertos al público. Con una ruta total de 700 metros, los visitantes podrán disfrutar de vistas únicas del principal atractivo natural de Ronda desde una nueva perspectiva.
El proyecto incluye la instalación de pasarelas de madera de 1,2 metros de ancho y tres metros sobre el cauce del río, utilizando maquinaria especializada para su colocación. Además, estos elementos serán desmontables, garantizando así que no se altere el entorno natural en caso de necesitarlas retirar.
Este desarrollo ha recibido un importante apoyo de la Diputación Provincial de Málaga, que subvenciona el 50% del coste, reconociendo el impacto positivo que esta infraestructura tendrá para el turismo en la provincia y en Andalucía. El diseño del proyecto ha sido elaborado por Luis Machuca y Asociados.
La primera fase del Camino del Desfiladero ya ha demostrado ser un éxito, atrayendo a más de 40.000 visitantes, y se espera que esta nueva etapa consolide al recorrido como un referente turístico de la región.