sábado, 20 abril 2024
InicioTres fotosRubén es enorme

Rubén es enorme

Rubén tiene 6 años. Se ha bajado de un coche en el aparcamiento del Complejo Polideportivo El Fuerte. Por la otra puerta, la del conductor, sale una mujer. Por el beso que se han dado podría jurarse que es su madre. La madre se queda de pie, junto al coche, mirando como Rubén se aleja, como si de un ensayo de vida se tratara. Rubén vive su momento: perfectamente peinado con el pelo mojado, con la camiseta del Betis recién estrenada, con su botella de agua, su mochila, con sus
sueños inmaculados. Sale a correr al ver llegar a algunos compañeros de su grupo de fútbol, no puede aguantar la sonrisa, la alegría de verles.
– ¿Qué es adidas? – dice un compañero señalando la mochila.
– No, der Betis – dice Rubén señalando la camiseta.
– Nooo, yo digo la mochila – Puntualiza el amigo.
– Ah, la mochila? De adidas no, de intersport dice mi madre.
Poco importa que no sean precisos con las palabras, a los dos les vale y entran contentos al campo de fútbol.
– ¡Rubén! ¡Buenas tardes! ¿y ese peinado tan “fashion”? – le saluda el entrenador.
– No es de fachion profe es Denbapé.
Él, sigue a lo suyo. Ni está en este mundo ni se le espera.
Otro compañero se ha detenido delante de él con una actitud hipnótica en el marcado
flequillo. Le acerca el dedo despacio para tocarlo y entonces él reacciona.
– ¡Killo noo! que le ha costao mucho trabajo a mi madre.
El profe les reclama con sorna. – ¡Dejarse ya de peinados y coger un balón para cada uno, venga¡
Rubén obedece y coge un balón. Se lo pone bajo el brazo y con la otra mano se repasa el flequillo con el mismo cuidado que lo haría el que desactiva una bomba.
¡Rubén es enorme!

Publicidad

Lo más leído...