Existe bastante preocupación en la plantilla de trabajadores de Unicaja, no solo de las oficinas, sino también del Centro de Proceso de Datos y de las distintas actividades que engloban la Obra Social Cultural de Ronda, como los colegios. La dirección de Unicaja ha puesto sobre la mesa a los sindicatos el despido a través de ERE o jubilaciones anticipadas la cifra de 1513 empleados, 1015 en oficinas y 508 de los servicios corporativos.
Este proceso ha llegado con la fusión del pasado 30 de julio con Liberbank, entidad compuesta en 2011 por la fusión de las Cajas de Ahorro de Asturias, Cantabria y Extremadura.
La historia de Unicaja ha venido marcada por las fusiones desde que se expolió a la Caja de Ahorros de Ronda que era la primera entidad de Andalucía, fusionándola en Unicaja el 18 de marzo de 1991 junto a las Cajas de Ahorro de Cádiz, Almería, Málaga y Antequera. Algunas de estas cajas en posibles quiebras.
Ante estos despidos voluntarios o forzados por la dirección los sindicatos se han puesto en pie de guerra y han anunciado que si continúan en su decisión habrá huelgas y movilizaciones. También el ayuntamiento de Ronda se ha solidarizado con el colectivo de trabajadores y aprobó en el pasado pleno una moción del PSOE a la que se han sumado todos los grupos municipales, en la que se rechaza esta decisión y se exige a la dirección de la entidad Unicaja a que se mantenga y cumpla con los acuerdos que se firmaron en su día con la Caja de Ahorros de Ronda, por la que se consolidaba los puestos de trabajo en la ciudad, así como mantener las oficinas existentes a la firma, el Centro de Proceso de Datos y los colegios existentes dependientes de la extinta Caja de Ahorros de Ronda.
Está claro que bajo el mandato de Braulio Medel como presidente las fusionas en Unicaja son una constante, y no es de extrañar, pues con cada fusión se crea una nueva entidad y se prorroga por otro periodo de varios años que Medel siga estando al frente de la presidencia.
Mientras los clientes que somos los principales activos de la entidad seguimos sufriendo la falta de atención, nuevos horarios de las ventanillas abiertas, el inmenso coste de comisiones de todo tipo que nos cobra, va a llegar un día que nos cobrarán por pisar las oficinas del banco.
En fin, fusión nueva, cierre de oficinas, masivos despidos del personal y peores atenciones a los clientes. Si Don Juan de la Rosa levantara la cabeza.