viernes, 29 marzo 2024
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Benaoján, excelentes chorizos…(y molletes apetitosos) 

 Este pueblo malagueño que hasta ahora era referencia y símbolo obligado por las excelentes chacinas que salen de sus fábricas y se envían a media España, ahora ha saltado a los medios informativos como creador y exportador de otro producto que, igualmente, tiene que ver con la manduca diaria. Igual, que los productos de ese animal tozudo y hozador que es el cerdo, ahora se muestra como una referencia obligada para quienes, en su desayuno mañanero, disfrutan cada mañana con un mollete artesano que, asimismo, sale de Benaoján, en la provincia de Málaga y al sur de España, y no conoce fronteras por su pasmosa expansión. Ya impregnado de mantequilla o aceite, el mollete benaojano – con ambos aditivos tuve el placer de desayunar en mis años de la niñez juventud – viene alcanzado una fama que no tiene fronteras en nuestro país, porque a todos los rincones patrios llega, y es celebrado como excelente bocado junto al café del día.    

   El mollete benaojano, salido del horno de Máximo, desde siempre había disputado el sustento mañanero con los tradicionales churros, a los que, sin la menor duda, le ganó la partida allá en los años 50 de mi niñez. Bien empapados de aceite o de lustrosa mantequilla, fue insustituible en mis desayunos, como lo fue, puedo dar fe de ello, en los de buena parte de los habitantes de Benaoján, como refrigerio obligado a la hora de emprender las faenas de esta eminente localidad malagueña y chacinera.    

   Tierno y extremadamente esponjoso, era – y sigue siéndolo con  – el desayuno por antonomasia de  las familias benaojanas y buena parte de las que habitaban en los pueblos de los alrededores. Con la particularidad de que ahora, por la excelencia del exquisito bocado que ofrece, lo es de buena parte del país y las ciudades circundantes que no cejan en su empeño de que esté exquisito bocado mañanero les llegue para así empezar el día gratamente con su degustación.    

   ¿Y qué substancias componen este exquisito refrigerio mañanero? Asombra que por su textura y exquisito sabor solo concurran elementos tradicionales en los hornos de aquí y acullá, como agua, harina, sal y masa madre. Pero es en la forma y cantidad que se utiliza para su hechura, amén de la habilidad del panadero para darle esa esponjosidad característica, en donde radica la textura y el sabor incomparable de este producto único para la primera ingesta del día. 

   Los molletes benaojanos llegan, hoy por hoy, a media España, y los diferentes medios de información hacen eco de ello y vienen ocupándose de su forma y sabor único, que los hacen insustituibles para la primera comida mañanera. Bien embadurnados de aceite o manteca de cerdo, elementos que coadyuvan, a su forma y paladar, constituye, hoy por hoy, el desayuno predilecto en media España y en buena parte de la otra.    

    Máximo, el fundador de la dinastía, no podría estar más orgulloso de quienes siguieron sus pasos y lograron que su mollete llegara, hoy por hoy, a infinidad de hogares españoles y obtuvieran el beneplácito que, sin la menor duda, ostentan, merced a la predilección de quienes aspiran a empezar el día con buen pie.    

   Benaoján, que puede presumir de excelentes chacinas, goza ahora del añadido de este particular mollete que se disputan los sibaritas del buen de comer de media España.

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